A menos que el aguacate que traes del mercado ya esté maduro, debes madurarlo a temperatura ambiente. Una vez maduro puedes guardárlo en el refrigerador para ayudar a mantenerlo en su punto máximo de madurez algunos días.
Si cortas el aguacate y te das cuenta de que no está maduro, puedes aplicarle unas gotas de limón y aceite de oliva, y cubrirlo con una envoltura de plástico para guardarlo en el refrigerador hasta que se ablande.
Si encuentras que la superficie cortada del aguacate se torna oscura, simplemente corta la capa superior y consume el resto de la pulpa en verde.
Y recuerda, los aguacates no se pueden congelar.