Esta salsa se originó a principios del siglo XX en Worcester, Inglaterra, por un dúo de científicos que luego formaron una empresa de condimentos Lea & Perrins.
La salsa es ácida y picante, y originalmente se añejaba en barril para agregarle su toque picante.
Dado que la salsa Worcestershire tiene un gran sabor, puede adaptarse muy bien a recetas en las que deseas condimentar intensamente un plato de forma rápida. Incluso una cantidad de un par de cucharadas o menos es suficiente.
A menudo la puedes encontrar en recetas de salsas o para marinar carnes jugosas. Resalta también el sabor de los sudados o cocidos a fuego lento.
Si no la tienes en tu despensa, te damos algunas ideas para sustituirla;
- Media cantidad de salsa de soya y media cantidad de salsa de tomate, por una cantidad de salsa Worcestershire
- Para cada cucharada de salsa Worcestershire, mezcla 1/4 de cucharadita de azucar morena + 2 cucharaditas de salsa de soya + 1/4 de cucharadita de jugo de limón + unas gotas de salsa picante
- Reemplaza una cucharada de salsa Worcestershire por una cucharada de salsa de soya + media cucharada de vinagre de manzana + una pizca de peperoncino